Transformaciones sucesivas de unos animales: los primeros efectos de morphing en el cine.
Willow (George Lucas, 1988) – Morphings YouTube
Una de las primeras realizaciones de Industrial Light and Magic.
Transformaciones sucesivas de unos animales: los primeros efectos de morphing en el cine.
Willow (George Lucas, 1988) – Morphings YouTube
Una de las primeras realizaciones de Industrial Light and Magic.
Willow es una película del año 1988 dirigida por Ron Howard, y explica la tierna historia de Willow, un nelwyn o hombre bajo, que se ve con la tarea de llevar a Elora Dana hasta su destino: destruir a la malvada bruja que amenaza con eliminar a todos los seres de la tierra, la reina Bavmorda. Todo esto acompañado por un simpático delincuente llamado MadMartigan y una hechicera un tanto especial. Ésta puede parcer una historia poco original, que recuerda claramente a las historias de Tolkien, pero que cuenta con un personaje tan emblemático que ha terminado conviertiéndola en una película de culto.
Hay muchos aspectos a destacar de esta obra cinematográfica, desde la banda sonora a la interpretación del protagonista, pero nos centramos en la importancia de los efectos visuales que incorpora. Se trata de una película fantástica, con multitud de seres mágicos y hechizos, maldiciones y magos. Era necesaria la incoporación de algunos recursos digitales, sobre todo en el caso de los trucos realizados por Fin Raziel, la hechicera que acompaña a Willow. Y ella es la protagonista de la escena más destacada cuanto a medios digitales: la escena en la que Willow, que desconoce el funcionamiento de la varita mágica, intenta transformarla en ser humano, convirtiéndola sin querer de cabra en avestruz, luego en tortuga, después en tigre y finalmente en mujer. Esta escena fue planeada inicialmente con medios más sencillos, intentando sobreponer las imágenes, pero el efecto no era el deseado. Así que se encargó a ILM la realización de la escena mediante programas informáticos. Y por primera vez se introdujo el morphing en el cine (consiste en convertir una imagen en otra de manera fluida por medio de cálculos matemáticos de suma de porcentajes de éstas). Por este brillante trabajo la empresa ILM sería premiada. Todas las transformaciones son igualmente eficaces y reales, pero destaca sobre todo el paso de la pequeña tortuga al tigre, por el cambio de forma, estado y tamaño.
Es en realidad un trabajo muy bien conseguido, pues 20 años después sigue siendo óptima la transformación de la hechicera, y gracias al éxito de esta escena se han desarrollado mucho más las técnicas de morphing. Hay que remarcar la valentía de ILM al introducir esta novedosa técnica, y lo acertado del resultado, que suponía un verdadero avance, que para muchos pasó desapercibido por lo natural del resultado.
Cati Moyà
junio 2009