Las aventuras de un robot que sobrevive en una Tierra destruída y que se enamora de un(a) robot extraterrestre.
Wall-E (Andrew Stanton, 2008)
Tráiler latino YouTube
Oscar 2009 (mejor largometraje de animación). El mejor film de Pixar -después de Finding Nemo.
En un mundo de hombres mecanizados, una máquina nos enseñará que es la humanidad. Con uno de los personajes más carismáticos del cine de animación lleva al extremo la premisa básica del cine de Pixar, hacer que el cine sea mucho más que un simple entretenimiento, llegar al fondo de nuestras emociones y conseguir que seamos como niños, por primera vez delante de una pantalla.
La primera media hora del film, es una obra maestra. El robot protagonista está inspirado en Buster Keaton, y el principio del film es totalmente mudo, pero simplemente con la fuerza de sus imágenes consigue meternos de lleno en la película. Wall-e es un radiocasete, un walkman con ruedas, y Eva es un iPod, un robot de última generación: del diálogo entre el cine más clásico y las técnicas más nuevas sale un film genial. La relación entre estos dos personajes es uno de los puntos centrales del film. Wall-e es un robot solitario obsesionado con “Hello Dolly” y su romanticismo. Cuando llega Eva, el se enamora y la sigue hasta los confines del espacio. Este es el motor de la narración, pero sobretodo el film trata otros temas de mensaje aún más profundo. Es aterrador el retrato que hace de una sociedad obesa del futuro, viviendo en una ciudad-jaula con todas las comodidades pero sin ningún atisbo de vida.
Técnicamente el film es muy interesante también. Para mí el mayor logro de la película está a nivel fotográfico. Es interesante como la figura del director de fotografía está tomando fuerza en el cine de animación, y cada vez más, la profesión tiene que adaptarse a un entorno digital. El film tiene movimientos de cámara imprecisos, bruscos, con desenfoques y zooms exagerados. Esto se pudo ver por primera vez en “El ataque de los Clones” de George Lucas, film casi totalmente digital. Estos aspectos añaden gran realismo, y le aportan frescura e imaginación al plano. Es interesante ver como añadir errores de forma digital al encuadre lo puede enriquecer. En esta línea es muy interesante la última película de “Star Treck” de JJ Abrams, en la que las constantes entradas de luz a cámara, hechas por postproducción digital, llenan el film de un aspecto mágico.
Para acabar, quería hacer mención a los títulos de crédito del film. En ellos podemos ver un repaso a toda la historia del arte. Los creadores reivindican el cine de animación en 3D como una de las mayores formas del arte actual, y no como algunos pretenden considerarlo, una simple distracción para niños.
Carles Soteras
junio 2009