Del Himalaya al Big Bang: un zoom cósmico a partir del mapa 3D del universo más completo que existe.
The Known Universe (Carter Emmart, 2009) YouTube
Basado en el Digital Universe Atlas producido por el American Museum of Natural History y el Hayden Planetarium de Nueva York.
Durante siglos, el hombre ha creído vivir en el centro del universo. La teoría geocéntrica promovía la idea de que la Tierra era el centro alrededor del cual giraba el Sol, los planetas, las estrellas, los meteoritos y el resto de elementos de los que se tenía conocimiento. Dicha teoría respondía a una visión antropocéntrica del universo muy ligada a la doctrina religiosa. Naturalmente, el hombre, hecho a imagen y semejanza de Dios, y su casa la Tierra, debían ser el centro de todo. Durante mucho tiempo fue la única teoría aceptada. El decir lo contrario llevó a la hoguera a más de uno, acusado de herejía.
Con el paso de los siglos la ciencia nos ha hecho retractarnos. Hoy sabemos como es en realidad el universo en el que vivimos: enorme e inalcanzable. Hoy nos rendimos ante la evidencia de que muy posiblemente conozcamos tan solo una parte muy pequeña de la totalidad del universo. Sin embargo, resulta sorprendente lo mucho que hemos avanzado en materia de astronomía.
«The known universe» muestra en siete minutos todo lo que se sabe a día de hoy con respecto a nuestro universo (a saber si es mucho o poco) a través de un viaje que nos traslada de los picos del Tíbet hasta los limites de nuestro conocimiento.
Nos alejamos de la Tierra para descubrir lo que hay más allá del sistema solar, más allá de las galaxias, para luego hacer el camino de vuelta y regresar al hogar insignificante en el que vivimos. La tierra está inmersa en un universo que se expande continuamente. Miremos donde miremos, vemos estrellas y galaxias que se alejan de forma continua de nosotros, y entre sí. Todo se separa de todo. En este punto surgen preguntas comprensibles acerca como empezó todo, acerca del tamaño del universo. Si el universo está en constante expansión, eso quiere decir que no es infinito. ¿Y si no es infinito, que hay más allá? ¿La nada? ¿Y qué es la nada? Las respuestas, si es que las hay, son de difícil comprensión. Nuestra mente no es capaz de digerir tanta abstracción. Y el no tener respuesta nos asusta.
«The known universe» parte de las montañas del Himalaya. Se aleja paulatinamente hasta dejar ver en pantalla la esfera terrestre en su totalidad. Poco a poco la Tierra se va haciendo más y más pequeña, y observamos todo lo que le rodea, desde el sol hasta el resto de órbitas planetarias. Júpiter, Marte, Saturno…todos y cada uno de los planetas del sistema solar se muestran justo en el lugar exacto en el que se encuentran. Los tamaños, las distancias, el tiempo y la velocidad….toda medida es precisa. Vemos las constelaciones del zodíaco, y el sistema solar que se pierde en la negra inmensidad. Vemos el brillo real del sol en comparación con las otras estrellas. La vía láctea y muchas otras galaxias. Y al final uno se pregunta como es posible que el ser humano, dentro de su mediocridad, haya sido capaz de llevar sus observaciones tan lejos. Ahí termina nuestro conocimiento, pero hay que reconocer que no es poco.
«The known universe» nos recuerda lo pequeños que somos en relación a un universo insondable, del que aún tenemos mucho que aprender.
Max Tovias
junio 2010