Tras haber llevado a los espectadores al reino de los juguetes, de los bichos, de los monstruos, de los peces y de los súper héroes, los maestros de Pixar Animation Studios (Los Increíbles, Finding Nemo, Monsters, Inc.) y el director ganador del Premio de la Academia John Lasseter (Toy Story, Toy Story 2, A Bug’s Life) volvieron con una aventura en el mundo de los automóviles.
Cars trata sobre un novato automóvil de carrera (Rayo McQueen) llamado a tener éxito, quien descubre que la vida se trata de viajar y no de llegar a la línea final, cuando inesperadamente se desvía en la soñolienta ciudad de Radiador Springs en la Ruta 66.
La película representa uno de los retos más desafiantes y ambiciosos para Pixar. Un film donde los personajes son metálicos y de pesados contornos implicaba la aplicación de nuevos recursos para mostrar con exactitud los reflejos. Así pues, Cars es el primer film de Pixar que utiliza la técnica del “ray tracing” en prácticamente cada toma, la cual permite que los automóviles reflejen con credibilidad su entorno.
Otro de los logros más importantes del film es el «ground-locking system», que permite que el automóvil esté firmemente afirmado en el suelo, a no ser que la historia requiera una excepción a esta regla. Por otro lado, otro logro de importancia a nivel de animación es el “universal rig”, el cual funcionó prácticamente con cada personaje. Esto significa que los controles de animación podían aplicarse a cada uno de los casi 100 personajes automóviles, sin necesidad de crear nuevos componentes de animación. El mismo chasis básico se ajustó a la geometría de cada auto individual, pero la suspensión se adecuó a cada vehículo.
Lasseter, para conseguir la “fidelidad a los materiales” instruyó a su equipo de animación para que no comprimieran ni estiraran los automóviles, lo cual sería inconsistente con su naturaleza metálica. Así pues, los animadores realizaron “pruebas de ruta” para lograr comportamientos y interpretaciones de los personajes que fueran creíbles (P.ej. el uso de neumáticos a modo de “manos”). Según el animador supervisor Scott Clark, «Obtener de estos personajes un rango completo de interpretación y emoción y hacer que sigan pareciendo automóviles fue una ardua tarea, pero eso es lo que la animación hace mejor. Uno usa la imaginación y hace que los movimientos y gestos encajen con el diseño”.
En definitiva, Cars representa un nuevo paso en la técnica de animación para los estudios Pixar y se erige como la película en la que no hay un solo píxel en pantalla que no tenga un extraordinario nivel de detalle ni de cuidado.
Tras haber llevado a los espectadores al reino de los juguetes, de los bichos, de los monstruos, de los peces y de los súper héroes, los maestros de Pixar Animation Studios (Los Increíbles, Finding Nemo, Monsters, Inc.) y el director ganador del Premio de la Academia John Lasseter (Toy Story, Toy Story 2, A Bug’s Life) volvieron con una aventura en el mundo de los automóviles.
Cars trata sobre un novato automóvil de carrera (Rayo McQueen) llamado a tener éxito, quien descubre que la vida se trata de viajar y no de llegar a la línea final, cuando inesperadamente se desvía en la soñolienta ciudad de Radiador Springs en la Ruta 66.
La película representa uno de los retos más desafiantes y ambiciosos para Pixar. Un film donde los personajes son metálicos y de pesados contornos implicaba la aplicación de nuevos recursos para mostrar con exactitud los reflejos. Así pues, Cars es el primer film de Pixar que utiliza la técnica del “ray tracing” en prácticamente cada toma, la cual permite que los automóviles reflejen con credibilidad su entorno.
Otro de los logros más importantes del film es el «ground-locking system», que permite que el automóvil esté firmemente afirmado en el suelo, a no ser que la historia requiera una excepción a esta regla. Por otro lado, otro logro de importancia a nivel de animación es el “universal rig”, el cual funcionó prácticamente con cada personaje. Esto significa que los controles de animación podían aplicarse a cada uno de los casi 100 personajes automóviles, sin necesidad de crear nuevos componentes de animación. El mismo chasis básico se ajustó a la geometría de cada auto individual, pero la suspensión se adecuó a cada vehículo.
Lasseter, para conseguir la “fidelidad a los materiales” instruyó a su equipo de animación para que no comprimieran ni estiraran los automóviles, lo cual sería inconsistente con su naturaleza metálica. Así pues, los animadores realizaron “pruebas de ruta” para lograr comportamientos y interpretaciones de los personajes que fueran creíbles (P.ej. el uso de neumáticos a modo de “manos”). Según el animador supervisor Scott Clark, «Obtener de estos personajes un rango completo de interpretación y emoción y hacer que sigan pareciendo automóviles fue una ardua tarea, pero eso es lo que la animación hace mejor. Uno usa la imaginación y hace que los movimientos y gestos encajen con el diseño”.
En definitiva, Cars representa un nuevo paso en la técnica de animación para los estudios Pixar y se erige como la película en la que no hay un solo píxel en pantalla que no tenga un extraordinario nivel de detalle ni de cuidado.
Irene Peralta
mayo 2010